EL HIBRIDO DEL JILGUERO EUROASIATICO X CANARIA

EL HÍBRIDO DE JILGUERO EUROASIÁTICO X CANARIA
ENRIQUE GÓMEZ MERINO Juez de fauna, híbridos y exóticos C.N.J / FOCDE
Es el híbrido de jilguero euroasiático (carduelis carduelis) un ejemplar muy querido y apreciado por todos los afi¬cionados en general. Es un sujeto que auna un bello colorido y un canto muy agradable y variado. Por ese motivo es doble¬mente estimado por criadores que cultivan el "color del plumaje" y por los que se dedican al "canto" de estas pequeñas aves. Trataremos aquí al híbrido de jilguero en cuanto a "la pluma" se refiere.
Efectivamente el jilguero podemos hibridarlo o cruzarlo con la canaria, así como con cualquier otro sujeto silvestre. Híbridos como el de jilguero x verderona son corrientes hoy en nuestros campeonatos.
Aunque Gregorio Mendel, sabio hibridista austríaco, nos dice en su primera ley sobre la hibridación (ley de la uni¬
formidad de la P generación filial) que todos los descendientes (Fl) del cruce entre dos razas puras son iguales entre
sí, veremos que realmente estudiando a los sujetos (uno a uno) podemos encontrar diferencias notables. Cuando la
canaria utilizada no es mulada, los híbridos serán parecidos presentando colores y dibujos muy similares, sin embar¬
go si la canaria es mutada (color distinto al ancestral) los híbridos tendrán un fenotipo que variará en función de la
mutación utilizada en el cruzamiento (recesiva, dominante, bruna, ágata, etc.). En general los caracteres presentes en
el híbrido reflejarán los de las especies parentales.
Los parámetros que vamos a estudiar en este individuo serán: el color, el dibujo o diseño, el plumaje, la forma, la
talla, la posición o postura y la condición. Vemos por tanto que no es sólo "la pluma" lo que valoramos en el pájaro
sino todos los epígrafes referidos en este párrafo.
Trataremos de enunciar las condiciones óptimas para que nuestro protagonista participe en un concurso y tenga opción y posibilidades de ser un campeón. Nuestro "híbrido de competición" será:
De color natural y derivado de las especies progenitoras. Si es de tonalidad uniforme, puro y brillante alcanzará alta puntuación en este epígrafe. Además si se trata de un color intenso, armónico y bien definido seguro que alcanzará algunos de los galardones en esta variedad.
La máscara debe presentar un color rojo-anaranjado con tonalidad uniforme. En los híbridos de fondo blanco o gris¬es, tengamos en cuenta que la máscara aparecerá de un color gris perla brillante, ésta se penalizará si no está bien marcada y delimitada.
El babero no ha de estar corrido al cuello ni al pecho defecto habitual en estos sujetos. Las mejillas y el cuello serán gris claro o de tinte brunáceo.
El pecho con fondo claro tendrá a ambos lados una tonalidad bruna o grisácea encontrándose ausente el lipocromo amarillo. El manto o dorso será de color marrón oscuro o gris con estrías negras mientras que las alas serán negras ribeteadas de amarillo. Las rémiges terminarán con el borde grisáceo. El extremo de las coberteras alares primarias presentarán una lista amarilla que a veces toma una tonalidad marrón-anaranjada. El vientre y bajo vientre podrá presentarlo blanco o blanco sucio.
La cola es negra con pequeñas manchas grises en el extremo, también las timoneras externas en su parte inferior ten¬drán manchas blancas grisáceas.
Las patas y dedos serán de color carne y las uñas serán castaño oscuras. En otras ocasiones tanto las patas como las uñas son muy oscuras.
Los ejemplares píos se permiten en los concursos pero únicamente serán óptimos cuando presenten los campos de color repartidos regular y simétricamente por todo el cuerpo en una proporción lo más aproximada al 50 %. En cuanto al dibujo o diseño hemos de decir que debe poseer el 50 % de los diseños melánicos o lipocrómicos de sus ] progenitores. Éstos serán bien marcados, nítidos, regulares y simétricos. Las irregularidades de distribución, asimetrías, anomalías o borrosidades son causa de penalización.
La máscara bien dibujada y delimitada con línea regular y continua. El diseño del dorso será muy bueno cuando posea marca¬ciones o estrías oscuras bien definidas. Los flancos tendrán también marcaciones melánicas que destacarán del fondo. Cuando estas estrías llegan hasta el pecho, el diseño es excelente.
El plumaje debe ser compacto, bien adherido al cuerpo, completo, liso (sin rizos) y brillante (el exceso de nevadura se penaliza). Las plumas serán todas de su completa longitud, penalizándose las rotas, las que falten, las cortas, plumaje con rizos, el nevado basto y la falta de brillo. Es un grave error presentar en un certamen a un ejemplar cuya muda aún no haya finalizado. Es habitual encontrarnos a estos híbridos con "faldones" (plumas de los flancos levantadas) motivo de penalización en este epígrafe de la planilla.
No se permiten en los concursos los híbridos con moña o corona. Este carácter es propio de las canarias de postura, ejemplares que no debemos utilizar para las hibridaciones.
En cuanto a la forma hemos de ver en el sujeto híbrido las formas de sus progenitores fundidas en una.
Todas las partes de cuerpo han de estar perfectamente proporcionadas entre sí dando una sensación de elegancia,
armonía, vigor y robustez. Poseerá una figura fuerte, esbelta y elegante.
La forma de la canaria utilizada debe ser siempre la del "canario de color". Serán descalificados todos aquellos ejemplares que presenten una forma claramente identificada con algunas de las razas de postura (Norwich, Yorhshire, Gloster, etc.). Se penalizarán las desproporciones: cuello largo, corto, pecho abultado o hundido, patas largas, cuerpo muy estilizado, etc. Son de canto extraordinario los híbridos de jilguero cuando utilizamos la canaria timbrada, sin embargo presentarán un cuerpo excesivamente estilizado y patas desproporcionadamente largas penalizables en este apartado. El cuerpo en general debe ser redondeado de contornos con líneas suaves.
El dorso no ha de ser hueco sino que formará una línea con la cola. La cabeza redonda, proporcionada y en armonía con el cuerpo y el pico (éste semigrueso-cónico), intermedio entre los de sus progenitores. El pecho al igual que el abdomen no debe estar prominente o hundido.
La talla será intermedia de las especies de sus progenitores permitiéndose un desplazamiento del 40-60 % hacia cualquiera de ellos.
Según la subespecie de jilguero utilizada (español, europeo, siberiano, etc.) la talla del híbrido podrá oscilar entre 13 y 14.5 cms. aproximadamente.
La posición es la postura que adopta el híbrido cuando está subido en el saltadero de la jaula. Ésta debe ser aquella que presente al ejemplar elegante dando una impresión de fuerza y confianza, posado en el saltadero con gallardía, con viveza y con las patas semiflexionadas. No estará agachado ni excesivamente estirado. Sin temor ni nerviosismo. Se penalizará al ejemplar que revolotea constantemente, que se aferra a los barrotes de la jaula o que se mantiene en el suelo de la misma. De igual forma no debe presentarse apático y desganado.
Ha de tener las alas pegadas y simétricas al cuerpo tocándose las puntas sin superponerse. La cola alineada con el dorso formando éste con el posadero un ángulo de 45° aproximadamente. Afecta a la posición de forma negativa aquellos híbridos que poseen las patas excesivamente largas. Por todo lo expuesto el ejemplar debe estar adaptado y habituado a la jaula.
Es especialmente importante este epígrafe pues si el ejemplar no se queda quieto mal podrá el colegiado que lo enjuicia apreciar el conjunto de los parámetros de la ficha de enjuiciamiento.
El híbrido competitivo para participar en un certamen ha de tener una condición excelente. Debe estar completa¬mente sano, con los ojos vivos, brillantes, muy abiertos y redondos. El ejemplar enfermo será descalificado. El pico no será defectuoso, las mandíbulas encajarán perfectamente sin llegar a cruzarse formando una línea regular y al igual que las patas y los dedos no tendrán rugosidades, manchas ni escamas.
Las uñas estarán bien formadas, limpias, lisas e intactas. Se penalizarán las uñas largas, rotas, deformadas, incom¬pletas o de distinto color, (si falta alguna de ellas se descalifica al ejemplar).
Las mutilaciones, amputaciones, deformidades o malformaciones físicas de algún miembro, son siempre motivo de descalificación. El ejemplar estará limpio y aseado no debiéndose presentar descompuesto o embolado. Su condición ha de ser la ideal de concursante para participar en un certamen de belleza ya que cualquier evento ornitológico no es más que un concurso de pulcritud, elegancia y perfección.
La anilla adecuada para este ejemplar podrá ser la de 3 mm. de calibre (anilla necesaria para participar en cualquier evento ornitológico).
Es muy importante seleccionar la canaria adecuada para nuestras hibridaciones. Serán siempre como hemos dicho canarias "de color", de categoría intensa, aunque también dan buenos resultados para esta hibridación las canarias mosaicas (acentúan y marcan mejor la máscara en el híbrido). Han de ser canarias de calidad dentro de su estándar ya que el híbrido heredará el 50 % de las cualidades y defectos de sus progenitores. Son canarias recomendadas para hibridar con el jilguero: la canela o isabel amarilla intensa, la canela o isabel plateada, la ágata plateada factor de refracción, entre otras. Con la intención de asesorar técnicamente a los aficionados y criadores de esta variedad, escribo el presente artículo esperando sea del agrado de todos.

Buen aporte amigo, pero la descripción les ha faltado dar su carnet de identidad.
Un saludo